Las chupetas son una herramienta útil para tranquilizar a los bebés, y son efectivamente preferibles a que se chupen el dedo. Sin embargo, cuando los padres las usan por mucho tiempo, pueden afectar negativamente la salud oral del niño. Este es un resumen de algunos de los principales problemas del uso de chupetas a largo plazo.
El uso extendido de la chupeta puede interferir con la salida normal de los dientes y hasta afectar la alineación correcta de la mandíbula, según la Academia Americana de Odontopediatría. Los dientes frontales pueden hasta salir fuera del marco de la boca, lo que afectaría la posición de los demás dientes conforme salgan.
Si tiene dudas sobre el uso de chupeta de su niño o niña, hable con un dentista infantil acerca del mejor momento para terminar con el hábito de su pequeño. Típicamente no se recomienda el uso de chupeta a partir de los 3 años de edad. El dentista también podrá darle algunas recomendaciones sobre cómo deshacerse de la chupeta. Muchos niños y niñas dejan la chupeta por cuenta propia, pero otros necesitan un poco de motivación adicional.
Adicionalmente, se recomienda que hable con el dentista de sus hijos sobre cualquier aumento potencial del riesgo de deterioro dental debido a las chupetas. Esto es especialmente probable cuando la chupeta se cubre con azúcar u otra sustancia dulce. Similarmente, cuando usted lame la chupeta expone a su niño o niña a las bacterias en su boca, las cuales pueden aumentar el riesgo de caries. Mejor use agua para limpiar la chupeta.
El dentista de sus niños puede recomendar otros pasos para proteger la salud oral de sus pequeños, como el cepillado e hilo dental regular, y educarle en técnicas que puede usar en la rutina de higiene oral de su niño.
Contacte a nuestro equipo en Dental Depot si siente que la salud oral de su niño o niña puede ser afectada por el uso extendido de la chupeta. Uno de nuestros experimentados dentistas puede tratar los problemas que surjan a raíz de este hábito, además de hablarle sobre prevención.
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